domingo, 23 de mayo de 2010

Poesía: Konstantinos Kavafis

A continuación, les presentamos el increíble poema Itaca, de este poeta griego que vivó apenas veinte años (1895-1915). Agradecemos a la profesora Adriana Cid, que fue quien nos lo recomendó!

Cuando salgas en el viaje, hacia Ítaca
desea que el camino sea largo,
pleno de aventuras, pleno de conocimientos.
A los Lestrigones y a los Cíclopes,
al irritado Poseidón no les temas,
tales cosas en tu ruta nunca hallarás,
si elevado se mantiene tu espíritu, si una selecta
emoción tu espíritu y tu cuerpo embargan.
A los Lestrigones y a los Cíclopes
y al feroz Poseidón no encontrarás,
si dentro de tu alma no los llevas,
si tu alma nos los yergue delante de ti.
Desea que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas estivales
en que con cuánta dicha, con cuánta alegría,
entres a puertos nunca vistos:
detente en mercados fenicios,
y adquiere las bellas mercancías,
ámbares y ébanos, marfiles y corales,
y perfumes voluptuosos de toda clase,
cuanto más abundantes puedas oerfumes voluptuosos;
ve a muchas ciudades egipcias
para aprender, y aprender de quienes saben.
Conserva siempre en tu alma la idea de Ítaca:
llegar allí: he aquí tu destino.
Mas no hagas con prisa tu camino;
mejor será que dure muchos años,
y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,
rico de cuanto habrás ganado en el camino.
No has de esperar que Ítaca te enriquezca:
Ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.
Sin ella, jamás habrías partido;
mas no tiene otra cosa que ofrecerte.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.
Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,
sin duda sabrás qué son las Ítacas.